Laredo acogió del 9 al 11 de mayo la recreación de la
Toma del Rastrillar, una de las últimas batallas de la Guerra de la
Independencia, que propició la liberación de la villa de Laredo en 1814. La
celebración del Bicentenario del Sitio y Recuperación de la
Villa de Laredo en 1814 por los españoles incluyó
un desfile de tropas españolas, francesas e italianas, con más de un centenar
de recreadores, entre los que se encontraban miembros del Regto. Jaén de la
Asociación Voluntarios de la Batalla de Bailén. También se realizaron combates con fusiles y fuego de artillería.
En las escaramuzas se revivió el episodio en el que cayó
mortalmente herido el joven brigadier general Diego del Barco mientras lideraba
la ofensiva del ejército español.
Evitar el
“Gibraltar” del norte
A finales de 1813 el
joven brigadier coruñés Diego del Barco, protagonista de una meteórica carrera
militar, fue puesto al mando de los 9.000 soldados españoles que trataban
de tomar las fortificadas villas de Laredo y Santoña. Las dos plazas eran
ambicionadas por franceses y británicos, y se corría el peligro de que en las negociaciones
de paz, ambas se perdieran para España, dando lugar así a un nuevo “Gibraltar”,
en el norte. Fue por ello que el brigadier Diego del Barco, a pesar de que
carecía de las fuerzas necesarias en artillería e ingenieros como para tomar a
viva fuerza ambos emplazamientos, llevó a sus tropas a una furiosa y sangrienta
ofensiva a fin de conseguir recobrarlas para España antes de que se hiciera la
paz.
Para dar ejemplo a sus
hombres, el joven brigadier se puso a caballo al frente de las tropas en el
ataque nocturno que en la noche del 21 de febrero de 1814 realizó su infantería
sobre los fuertes de La Rochelle y La Soledad en la colina del Rastrillar que
domina Laredo. Al poco de iniciado el sangriento ataque, un casco de granada le
hirió de gravedad en una pierna. Le sustituyó su segundo, el coronel, y también
coruñés, Juan José San Llorente. Evacuado a la cercana villa de Colindres, para
consternación de todos y como solía pasar en la época, la herida se gangrenó y
falleció el 26 de febrero de 2014, cuando la guerra ya estaba prácticamente
acabada.